LML /La increíble historia de la joven de 20 años que por error apostó a favor de Arabia Saudita en la que ganó 27 mil pesos
Mientras Argentina sufría una derrota, Evelina Lenzi no entendía cómo pero, la plata de su cuenta en una página de apuestas ascendía. El trasfondo de un hecho peculiar que Ezequiel Beider, su novio, hizo viral y qué quiere hacer ella con el dinero que ganó por equivocación.
El lunes, Evelina Lenzi, se había levantado a las seis de la mañana. El cansancio no le ganó a la ansiedad: esa noche solo pudo dormir dos horas. El martes se despertó a la misma hora. Prendió la tele. Desayunó lo que su estómago angustiado le permitió. Ezequiel Beider, su novio, estaba igual que ella y que buena parte de los argentinos: despierto, expectante e ilusionado. Empezaron a hablar por Whastapp. Él desde su casa en Caballito rodeado de otros cuatro amigos, ella sola desde su departamento en Villa Crespo. Siguieron el debut de Argentina en el Mundial de Qatar 2022. Festejaron el gol de penal de Lionel Messi por chat y coincidieron, al cabo de la primera etapa, en un augurio trágico: que la Selección le ganaría a Arabia Saudita por mayor diferencia.
En los minutos muertos del entretiempo, Evelina sintió un impulso. La noche anterior había hecho algo por primera vez en su vida: caer en las apuestas deportivas. Ezequiel le había contado los pormenores de su bautismo: un desperdicio de mil pesos. Había apostado 500 pesos a que Irán no iba a meter goles en su debut: hizo dos. Había apostado otros 500 pesos a una combinada: que le ganaba Ecuador a Qatar (acertó), que le ganaba Inglaterra a Irán (acertó), que le ganaba Países Bajos a Senegal (acertó) y que le ganaba Estados Unidos a Gales (no acertó). Perdió los mil pesos. La casa gana.
Evelina se rió de su infortunio y le dijo que quería intentarlo. El bonus por la inscripción en la página de apuestas le adjudicó 800 pesos. Sus conocimientos de fútbol son discretos: lo asume. El “experto” en la materia es él. Los dos son hinchas de Boca, de la selección argentina y, particularmente, de Lionel Messi. Ezequiel le sugirió invertir su suerte de aprendiz en una apuesta combinada: dedicó 600 pesos al triunfo de Argentina sobre Arabia Saudita, Dinamarca sobre Túnez, Francia sobre Australia, Alemania sobre Japón y Bélgica sobre Canadá. El futuro dirá, otra vez, la casa gana.
Ninguno de los dos entendía mucho lo que había pasado: ni con el partido ni con la apuesta. El dolor instantáneo por la derrota redujo la atención por la apuesta ganada. Las horas contribuyeron a que la pena mermara y la incredulidad adquiriera relevancia. Juntos entendieron que no se trataba de un error de la página. Lo cuenta él: “En el entrentiempo, ella estaba convencida de que Argentina iba a meter un gol más. Quería apostar que iba a pasar eso y terminó apostado que Arabia Saudita lo iba a dar vuelta. Arabia Saudita tenía una cuota altísima al inicio del partido: pagaba 29. En el segundo tiempo y perdiendo, se multiplicó esa apuesta y se fue a 151″. Lo cuenta ella: “Después del primer gol de Arabia Saudita, me había quedado la página abierta en el celular, la recargué y vi que la cuenta había subido a seis mil pesos. ‘Qué raro, no es normal, no tendría que estar subiendo’, pensé. Después subió a siete. Ya no sabía qué había apostado. Argentina empezaba a perder y la plata empezaba a subir”.
El 2 que pulsó Evelina no eran los goles que convertiría Argentina en la segunda mitad sino la opción 2, correspondiente al segundo equipo, el designado por la FIFA como “visitante”: Arabia Saudita. Los 200 pesos de su apuesta crecieron 151 veces y se convirtieron en 27.456,24 por un impulso lúdico y un error de novata. Él tuiteó la equivocación de su novia: la viralización no se demoró.